lunes, 6 de septiembre de 2021

Descubre cuáles son tus aptitudes y cómo desarrollarlas

 


Si superas tus propias limitaciones, te resultará más fácil encontrar tu camino

Nunca es tarde para dar un nuevo giro a tu vida. Si te sientes estancado/a, sumérgete en tu interior y recupera todos aquellos talentos que permanecen dormidos.

Cada uno de nosotros tiene una cualidad innata que le distingue de los demás, un talento propio que, si lo cultivamos, puede darnos muchas satisfacciones, tanto personales como profesionales. La cuestión está en saber desarrollarlo, es decir, poner todo de nuestra parte para que no se quede únicamente en un proyecto. Convertirlo en una realidad depende en gran parte de nuestra voluntad y de nuestro esfuerzo. "El mejor lugar para descubrir tu talento eres tú mismo", asegura el escritor y dibujante Ashleigh Brilliant.

 ENCUENTRA EL GENIO QUE LLEVAS DENTRO

Es en nuestra infancia cuando empieza a definirse nuestro talento. El niño sabe por intuición cuáles son los campos que domina mejor: el dibujo, los deportes, la música... Pero al crecer, la lógica se impone y el mundo que hay a nuestro alrededor suele hacer todo lo posible para quitarnos esos sueños de la cabeza. ¡Cuántos talentos en estado embrionario se han quedado en nada por no haber apostado por ellos!

Una buena idea es volver a aquella época de nuestras vidas en las que todo era posible. Hacer memoria y recordar qué era aquello que tanto nos gustaba años atrás: sueños, estudios, aficiones... todos esos proyectos que acabaron quedando en el tintero y que nunca llegamos a materializar. Pintar un cuadro, montar un negocio, aprender un idioma nuevo, practicar un deporte... Hay muchas cosas que puedes hacer. Tan solo tienes que decidirte y empezar.

 DISFRUTA DE TU CREATIVIDAD

Pero no basta con la intención. Para que nuestros planes se conviertan en un éxito total, es necesario "pelearse" para conseguirlo. Una buena hoja de ruta facilitará considerablemente nuestra tarea.

  • Experimenta con tus muchas posibilidades. Vuelve a ser niño y disfruta con todo aquello que haces. No te cortes y prueba a hacer cosas diferentes, con alegría y de forma despreocupada. Es muy posible que puedas sorprenderte a ti mismo/a con una habilidad que desconocías. "No tengo ningún talento especial, solo soy apasionadamente curioso", aseguraba Albert Einstein.
  • Pregunta a los demás. Es posible que te falte la objetividad necesaria para valorar al cien por cien tu potencial. En este caso, puede ser útil preguntar a personas de tu confianza sobre los valores que creen que te hacen destacar sobre los demás. Apúntalos en una lista y haz un resumen de todas las coincidencias. Obtendrás una visión diferente, y seguramente, mucho más positiva, de ti mismo/a.
  • Aprende a detectarlo. ¿No estás muy seguro/a de cuál es tu talento verdadero? El formador de innovadores Ken Robinson, te da la clave para descubrirlo: "Cuando estás siendo creativo, haciendo aquello que más te gusta, lo sabes porque eso no te quita energía, sino que te da más. Las horas parecen minutos, las ideas fluyen y tú con ellas".

SUPERA TUS PROPIOS LÍMITES

En la vida, es posible que te encuentres muchos obstáculos, pero los más insalvables son los que te pones tú mismo/a. Sensaciones como la inseguridad, el miedo a fracasar, etc. pueden frenar tu trayectoria.

  • Abandona tu refugio. Para evitarlo, debes salir de lo que se denomina "zona de control", es decir, ese espacio conocido en el que te sientes cómodo/a y seguro/a.
  • Ve a por todas. Si realmente quieres mejorar, debes arriesgarte. Tal como decía el escritor francés Honoré de Balzac, "No existe gran talento sin gran voluntad".

ATAJOS QUE TE AYUDARÁN A REDESCUBRIRTE

Si vives encerrado en tus propias limitaciones, difícilmente podrás ir al encuentro de tu destino. Libérate y da un vuelco a tu vida. Te llenará de satisfacción.

  • Cultiva tus aficiones. No lo apuestes todo a un solo número. Ten varias inquietudes y diversifica tus intereses. Cuanto más sepas, más posibilidades de reinventarte tendrás. ¡La oportunidad que tanto buscas puede estar en los lugares más insospechados!
  • Vuelve a tener ilusiones. Enciende de nuevo la chapa del entusiasmo, ese motor que te permite ponerte en marcha y llegar lejos, más lejos incluso de lo que en un principio te podías esperar. El talento es un buen combustible. Llena tu depósito y ¡en marcha!
  • Asóciate. Si no te ves capaz de emprender esta búsqueda solo o crees que te falta motivación para hacerlo, busca ayuda. Un profesor, un socio, un compañero, etc. puede ser el segundo pilar sobre el que sostener tus nuevos proyectos. Trabajando juntos, codo con codo, estarás más seguro/a de tus propias capacidades. Será como las ruedecillas que se utilizan cuando se aprende a ir en bicicleta. Te darán la confianza necesaria para, más adelante, poder volar por tus propios medios.
  • Deja volar tu fantasía. Libérate por unos momentos de la realidad y atrévete a soñar despierto/a. ¿Qué te gustaría hacer? ¿Dónde te gustaría trabajar? ¿Cómo te imaginas dentro de unos años? No te pongas cortapisas, cuanto más lejos llegues, más claro tendrás tu verdadero camino.




Sé el escultor de tu propia vida

 

Prescinde de lo que no pertenece a tu sueño

"El progreso es siempre un proceso creativo", escribe Nick Tasler, especialista  en comportamiento humano, en Pshychology Today. Si nos vemos como pintores, estamos ante un lienzo en blanco que llenaremos con pinceladas de conocimientos, experiencias. Pero podemos decidir ser escultores y ver nuestra vida como una roca de mármol, imaginar cómo queremos progresar, e ir quitando todo aquello que no forma parte de nuestro sueño. "Para el escultor, la obra maestra ya está allí, bajo perfectas capas de mármol", asegura Tasler. "Para construir y mantener el progreso, debemos empezar a tratar la vida como escultores, más que como pintores".


jueves, 2 de septiembre de 2021

Espacio para descansar

 

Pon freno a tu tendencia a autoexigirte

Queremos llegar a todas partes y complacer a todo el mundo y esto, a veces, va en contra de nuestra salud y bienestar. La psicóloga Paula Davis-Laak, en un artículo publicado en Pshychology Today, señala cuatro grandes enemigos de nuestro derecho a tomarnos un descanso: el sentido de culpa por frustrar las expectativas de otras personas, no escuchar las señales del cuerpo; nuestras creencias sobre obligaciones y responsabilidades; y la incapacidad para sincerarnos. Davis-Laak nos anima a conectar más con nuestro organismo, dejando que lidere nuestras necesidades, y nos invita a replantearnos aquellas creencias que nos empujan a vivir así.