sábado, 28 de diciembre de 2013

Consigue que tus propósitos de año nuevo se hagan realidad

DETERMINAR LOS OBJETIVOS Y ESTABLECER UN PLAN, LA MEJOR ESTRATEGIA A SEGUIR


Para que este nuevo año sea mejor que el que acaba, no lo dejes en manos de la suerte. Decídete a actuar y tendrás más posibilidades de mejorar tu vida.


Suenan las 12 campanadas y brindamos por el nuevo año que empieza, 365 días en los que todo parece posible: aprender inglés, comer más sano, reciclarse en el trabajo, dejar de fumar, hacer deporte... Son proyectos que se formulan de forma sincera pero que, en muchas ocasiones, no se llegan a materializar. Para que este año puedas llevar a cabo con éxito todo lo que te propongas, es necesario elaborar un plan realista.

ESTABLECER METAS CLARAS

"Perdone, señor, ¿le importaría decirme qué camino debo tomar?, le preguntó Alicia a la oruga gigante. ¿Hacia donde vas?, le preguntó a su vez la oruga. No lo sé -respondió Alicia-. En tal caso -le contestó la oruga-, no importa el camino a tomar". Este diálogo, extraído de la obra maestra Lewis Carroll "Alicia en el país de las maravillas", ilustra muy bien la necesidad de concretar nuestros objetivos para que, de esta manera, podamos seguir el camino más directo hacia ellos.

De esta manera, en lugar de limitarnos a decir "este año voy a estudiar inglés", es mejor que especifiquemos más. Se trata de pensar no sólo en lo que haremos, sino también cómo, cuándo, dónde, etc. De esta manera no sólo estableceremos una meta, sino también la ruta que debemos seguir para llegar hacia ella.

EL MEJOR CAMINO HACIA TUS DESEOS

No basta con tomar una decisión. Ese es tan sólo el primer paso. Tienes por delante una larga trayectoria hasta llegar a tu objetivo. Para que te resulte más fácil, sigue los siguientes consejos:

-Motívate.- Muchos de los propósitos no se cumplen por falta de convencimiento. Si realmente quieres llevar a cabo tus planes, trata de auto motivarte pensando en las consecuencias positivas de tu decisión ("si dejo de fumar, me encontraré mejor y ahorraré").
-Trata de ser más realista.- Si nos marcamos objetivos muy ambiciosos ("quiero hacerme rico montando un negocio"), el riesgo de desanimarte antes de tiempo será alto. Si realmente este es tu deseo, es mejor que te marques metas más modestas y vayas ampliando tus miras a medida que avances. Como decía el filósofo chino Lao Tsé: "Un viaje de mil millas comienza con un paso".
-Sé perseverante.- Tomar una decisión es fácil pero llevarla a cabo exige tiempo y esfuerzo. No te desanimes ante el primer contratiempo y pon toda la carne en el asador para conseguir tus objetivos. "La gota horada la piedra, no por su fuerza, sino por su constancia", decía Ovidio.
-Busca apoyos.- A la hora de emprender un camino que se prevé largo, es mejor si se hace acompañado. Encontrar a alguien con los mismos intereses que tú te ayudará a sentirte más motivado ya que, cuando tu voluntad flaquee, siempre tendrás la de tu compañero para compensarlo.
-No lo postergues indefinidamente.- Una vez hayas tomado la decisión y cuentes con todo lo necesario para llevarla hacia delante, no valen excusas. Es el momento de actuar.

QUÉ HACER PARA NO OLVIDARLOS

Hay una serie de técnicas infalibles que te ayudarán a tener presentes los buenos propósitos durante todo el año:

-Ponlos por escrito.- En algunos países, los deseos para el año nuevo se apuntan en un papel pues creen que así hay más posibilidades de que se cumplan. Se trata de una costumbre muy eficaz ya que, de esta manera, nos comprometemos más con ellos.
-Díselos a alguien.- También es recomendable verbalizarlos explicándoselos a una persona de confianza.
-Recuérdalos.- Cada semana o 15 días, dedica un día a valorar el proceso en el que se encuentran.

¿QUÉ TIPO DE "EMPRENDEDOR" CREES QUE ERES?

Todos tenemos nuestros propósitos en la vida, pero no actuamos de la misma manera para conseguirlos. Para lograr el éxito más fácilmente, es necesario saber cuáles son tus puntos flacos y saber superarlos.

-EL SOÑADOR.- Creativo y sensible, eres una fuente inagotable de ideas. El problema es que, a pesar de tu actitud apasionada y entusiasta, casi nunca logras que se hagan realidad.

CONSEJO: Quédate únicamente con los planes que te parezcan más realistas y asequibles y desestima el resto. Establece una estrategia a seguir y comprométete contigo mismo a lograr tus objetivos.

-EL PERFECCIONISTA.-Le das tantas vueltas a las cosas y las analizas tan detenidamente que, al final, consigues la mitad de lo que te habías propuesto.

CONSEJO: Deja de esperar a que las circunstancias cambien por sí solas ("dejaré de fumar cuando no esté tan estresado /a en el trabajo") y decídete a actuar de una vez por todas.

-EL REALISTA.- Tienes los pies sobre la tierra y no te comprometes a nada que sabes que no podrás llevar a cabo. Una vez has tomado la decisión, trabajas a fondo para que tus buenos propósitos se hagan realidad.

CONSEJO: Es la actitud perfecta para conseguir todo lo que te propongas. En ocasiones, sin embargo, valdría la pena que fueras más fantasioso/a y tratarás de lograr proyectos más ambiciosos.

-EL INSATISFECHO.- Tu vida es una búsqueda continua de la felicidad. A pesar de que sueles llevar adelante gran parte de tus objetivos, nunca te parece suficiente.
CONSEJO: De vez en cuando, no estaría de más que reflexionaras sobre todo lo que llevas conseguido hasta ahora. Te sentirás mucho más feliz y realizado/a.


jueves, 26 de diciembre de 2013

Recuperar el optimismo


LAS PERSONAS POSITIVAS SE ENFRENTAN MEJOR A LAS DIFICULTADES DEL DÍA A DÍA


Adoptar una visión positiva frente a la vida es como jugar a las cartas con la ayuda de un comodín o cruzar un río de aguas bravas con un chaleco salvavidas. ¿Te sientes algo desanimado/a? ¿Has perdido tu capacidad para ver el vaso medio lleno? NO te des por vencido/a: recuperar el optimismo y aumentar tu nivel de felicidad está al alcance de tu mano.

"Casi todas las personas son tan felices como se deciden a serlo", aseguraba el político Abraham Lincoln. Y para tomar la que tal vez es la decisión más importante de nuestras vidas, que no es otra que la de luchar por nuestra felicidad, es necesario recuperar el optimismo. "La costumbre de ver el buen lado de cada cosa vale una fortuna", advertía  el escritor español Noel Clarasó. Esta capacidad para observar el mundo a través de una óptica más positiva no puede comprarse con dinero, pero sí que puede ejercitarse día a día.

AUMENTA TUS DEPÓSITOS DE OPTIMISMO

El máximo experto en optimismo, el doctor Martin Seligman, indica que, si bien hay personas que por naturaleza son entusiastas y otras que ven la vida a través de un filtro oscuro, este rasgo hereditario puede modificarse. De hecho, los especialistas sostienen que sólo el 25% del optimismo de una persona depende de los genes. El 75% restante puede potenciarse. No se trata, por tanto, de ser optimista sino de quererlo ser.

-Mantén la esperanza.- Aunque la situación se presente algo difícil o incierta, intenta hacer interpretaciones positivas que te sean favorables. La clave está en ver lo que muchos psicólogos llaman el "resquicio de luz". "Cuando quieres cambiar tus circunstancias, primero tienes que cambiar tu forma de pensar", aconseja la terapeuta Lisa Nichols.
-La recompensa.- Igual que la risa aporta alegría, los pensamientos optimistas atraen la prosperidad y el éxito. ¿Sabías que los comerciantes de talante optimista consiguen hasta un tercio de ventas más que los pesimistas? La célebre autora de "El secreto" lo resume con una sola frase: "Atraes lo que piensas". Un ejercicio que te ayudará a conseguir este propósito es introducir en tus conversaciones frases del tipo: "La buena noticia es que...", "pase lo que pase, voy a salir adelante...". "lo que ha sucedido me da la oportunidad de...", etc.
-Aprecia lo que tienes.- Los contratiempos de la vida suponen una oportunidad para valorar lo que se tiene y desprendernos de lo que no queremos. En lugar de centrarte en tus debilidades o en lo que no funciona, haz un esfuerzo por potenciar tus puntos fuertes y centrarte en lo que puedes hacer para mejorar cualquier situación. "El firmamento no es menos azul porque las nubes lo tapen o los ciegos no lo vean", reza un antiguo proverbio danés.
-Buenas vibraciones.- Tener amigos alegres incrementa en un 9% la capacidad de ser feliz, mientras que rodearse de personas pesimistas reduce en un 7% las emociones positivas. Procura, por tanto, relacionarte con gente animosa, que te ayude a ver el lado más amable de la vida.

EL EFECTO DOMINÓ DE LAS EMOCIONES POSITIVAS

"En los ánimos encogidos nunca tuvo lugar la buena dicha", dijo en una ocasión Miguel de Cervamtes. Cuando nos sentimos contentos y animados, en cambio, nuestros pensamientos se cargan de optimismo, una fuerza capaz de influir de forma positiva en todos los ámbitos de nuestra vida.

-La vida se simplifica.- Cuando el estado de ánimo es bueno, tendemos a ser, según indican los autores de "Optimismo inteligente", más benévolos y menos críticos, tanto con nosotros mismos como con los demás, nos resulta más fácil mantener la motivación y nos cuesta menos tomar decisiones.
-Buenos recuerdos.- Por el simple hecho de estar contentos, nuestra mente tiende a traer recuerdos buenos del pasado. Rememorar esos momentos agradables hace que la sensación de bienestar se consolide y prolongue.
-Abre la mente.- Los estados de ánimo positivos también generan formas de pensamiento más flexibles, algo que nos ayuda a encontrar soluciones más novedosas y creativas y a alejar los temores de nuestra vida.
-¿Estás desanimado/a?.- En esos casos, va muy bien dar paseos al aire libre -la luz del sol levanta el ánimo y mejora el humor-, hacer deporte y plantearse la posibilidad de tomar un suplemento dietético natural, que ayude a enfrentarnos a los problemas cotidianos con la energía y los ánimos renovados. Algunos de los ingredientes que han demostrado científicamente sus propiedades beneficiosas en situaciones de desánimo son el azafrán y la vitamina B6.

TOMA LA DECISIÓN MÁS SABIA

Se cuenta que el discípulo de un venerable sabio estaba extrañado y sorprendido de que su maestro estuviera siempre de tan buen humor, sonriente y feliz a pesar de las dificultades por las que atravesaba. Tal era su intriga que, un día, el alumno le preguntó:

-Maestro, ¿cómo es que siempre se te ve tan contento y satisfecho?
-Amigo mío, no hay secreto alguno en esto -respondió el sabio-. Cada día cuando me despierto me hago esta pregunta: "¿Qué elijo hoy? ¿Alegría o tristeza?". Y siempre escojo alegría.



domingo, 22 de diciembre de 2013

Utiliza el humor para mejorar tu estado de ánimo



LA RISA TE AYUDARÁ A GANAR SEGURIDAD Y ENERGÍA POSITIVA


Una carcajada a tiempo desdramatiza cualquier situación y ayuda a pensar de una forma más objetiva. Para obtener los máximos beneficios de la risa tan sólo tienes que hacer dos cosas: relajarte ¡y disfrutar!


Un experto en terapia de la risa realizó un curioso experimento, Invitó a la mitad de los trabajadores de una empresa a ver varios capítulos de la comedia "El show de Bill Cosby" y, a la otra mitad, películas dramáticas. El resultado fue sorprendente. Los que disfrutaron de la serie cómica demostraron mucha más iniciativa y creatividad que aquellos que tan sólo pudieron ver un drama tras otro. Así pues, el simple hecho de conectarnos con emociones positivas produce una descarga de energía muy beneficiosa para nuestro estado de ánimo y nuestra salud.


RISAS CONTRA NEGATIVIDAD


Y es que reírse con ganas es más que una demostración de alegría. Cuando lo hacemos, se activan las mismas zonas cerebrales implicadas en la consecución del placer. Por esta razón, nos sentimos más satisfechos, tranquilos y felices. La risa, además, relaja los músculos, nos ayuda a respirar más profundamente, aumenta nuestras defensas e, incluso, nos hace soportar mejor el dolor. Es, por tanto, una inagotable fuente de bienestar. "Cada vez que un hombre ríe, añade un par de días a su vida", aseguraba el escritor italiano Curzio Malaparte.

BENEFICIOS DEL BUEN HUMOR

Hay muchas cosas que el buen humor puede hacer por ti. Si eres consciente de ello, te será más fácil sacarte todo el partido.

Alivia el enfado y la ansiedad. "La risa es un tranquilizante sin efectos secundarios", aseguraba el humorista norteamericano Arnold H. Glasgow. Dicen que la risa es una respuesta antagónica de la ansiedad. Esto quiere decir que genera una serie de beneficios: relajación, alegría, etc. que pueden aliviar sentimientos como la tristeza, la angustia o la ira. Y es que estimula la producción de serotonina, una hormona con poder tranquilizante.

Ayuda a hacer amigos. A la hora de relacionarnos con los demás, una amplia sonrisa es la mejor carta de presentación. Es un lenguaje universal que nos servirá para romper el hielo y ofrecer una buena imagen de nosotros mismos. Cuando no sepas qué hacer o qué decir, sonríe. Tendrás mucho ganado.

Invita al amor. Las personas con sentido del humor suelen resultar más atractivas que aquellas que, a pesar de su belleza, son incapaces de entender una broma. La risa, además, establece una complicidad única en la pareja. "La capacidad de reír juntos es el amor", aseguraba la escritora Françoise Sagan.

Aumenta nuestras capacidades. El buen humor también estimula la producción de adrenalina, la hormona de la creatividad y la imaginación. Al liberarnos de la tensión, nos desbloquea y nos permite mostrar lo mejor de nosotros mismos. Las personas divertidas derrochan inteligencia, ingenio y amabilidad. ¡No se puede pedir más!

Soluciona problemas. La risa nació como necesidad de comunicación en épocas en las que el lenguaje todavía no estaba muy desarrollado, ya que permitía llegar a un buen entendimiento y aliviaba la tensión. Ante una situación delicada, nos puede ayudar a desdramatizar.

TÉCNICAS PARA SACAR EL MÁXIMO PARTIDO DE LA RISA

Hay personas que tienen una gran facilidad para estallar en carcajadas mientras que hay otras a las que reír les cuesta lo suyo. Si te encuentras en este último caso, gana buen humor con estas sencillas recomendaciones.

Rodéate de personas simpáticas.- Todos tenemos algún amigo o familiar "muy de broma". Se trata de personas simpáticas y positivas que siempre logran arrancarnos una sonrisa, incluso en los peores momentos. Busca su compañía y serás más feliz. ¡No hay nada más contagioso que la risa!

Apúntate a "El club de la comedia".- Películas cómicas, series de televisión, revistas de humor, teatro... Cualquier pasatiempo es bueno si te ayuda a olvidarte de los problemas y reírte a mandíbula batiente.

Recuerda momentos cómicos de tu vida.- Si estás algo decaído/a, echa la vista atrás y rememora las anécdotas más divertidas de tu vida. De esta manera, recuperarás las buenas sensaciones que tuviste en ese momento y aliviarás tu malestar.

Trata de ver el aspecto divertido de las cosas.-  Ver la vida desde el prisma del humor te ayudará a desdramatizar ciertas situaciones y abordarlas con una actitud lo más positiva posible. En ocasiones, un punto de vista diferente puede quitarle hierro al más peliagudo de los asuntos.

EL PODER TERAPÉUTICO DE LAS COSQUILLAS

Es la forma más rápida y sencilla de hacernos reír. Y no sólo eso, según un estudio, hacer cosquillas a nuestros seres queridos tiene múltiples ventajas.

Cómo realizarlas.- Las mejores cosquillas son aquellas que se hacen con las yemas de los dedos, de forma suave y envolvente.

Efectos.- Ayudan a ahuyentar el mal humor y la tristeza e, incluso, a estrechar lazos entre las personas. Al hacer cosquillas a nuestra pareja o a nuestros hijos se establece una corriente de complicidad y simpatía inmediata.



viernes, 13 de diciembre de 2013

Mejora tu humor y sácale el máximo partido a tu vida


MANTENERTE ACTIVO Y MINIMIZAR LOS PROBLEMAS TE HARÁ SENTIR FELIZ


Inevitablemente en algunas épocas, nuestro estado de ánimo no está en su punto más álgido. Rodearte de amigos, hacer actividades que te motiven e intentar cambiar tus preocupaciones por una sonrisa son los primeros pasos para recuperar la alegría.

Salir de paseo, ir al cine o jugar un partido de tenis son actividades que te distraen y te aportan un bienestar físico y emocional. Practícalas con asiduidad y sácales el máximo provecho, sobre todo en los momentos de bajón emocional. ¡Recuperarás antes tu energía y buen humor!


PEQUEÑAS ACCIONES EN TU VIDA DIARIA


La vida nos pone a prueba continuamente con sorpresas muy gratas, que acogemos con entusiasmo y sabemos exprimir, y con otras menos favorables. En este último caso, la actitud que tomamos frente a ellas es decisiva para darles un giro a nuestro favor y salir reforzados de ellas. El apoyo incondicional de nuestra familia y amigos son el mejor escudo para impedir que hagan mella en nosotros y la mejor defensa para superarlas.

Aprende a relativizar.- "Si exagerásemos nuestras alegrías como hacemos con nuestras penas, nuestros problemas perderían importancia". Esta máxima del ensayista francés Anatole France resume a la perfección la magnitud que toman muchos aspectos que podríamos relativizar. Ser conscientes de que nuestro humor es variable y quitar hierro a los momentos menos alegres nos permitirá analizar la situación desde otra óptica y entender que podemos hacer una lectura positiva de todo lo que nos ocurre.

Muévete.- Cualquier ejercicio físico, desde caminar o subir escaleras hasta hacer escalada, provoca un estado de felicidad natural. Elige la actividad que más te guste -el yoga y el pilates son disciplinas con un impacto muy favorable sobre el estado de ánimo- y ponte en acción. Si la practicas con algún amigo/a, multiplicarás los beneficiosos efectos del deporte, al sumarlos con los que aporta la buena compañía. El baile, por ejemplo, también es una excelente opción: combina el movimiento con la música -intenta elegir las canciones que más te gusten para disfrutar plenamente de la experiencia sensorial-.

Sé generoso/a.- Ayudar a los demás de forma desinteresada produce una inmensa sensación de bienestar y satisfacción a quien lo hace. Muchas investigaciones han concluido que la generosidad ayuda a sentirte bien y da sentido a la vida. Comparte tus cosas, implícate con los demás e intenta colaborar con distintos proyectos.

Organízate.- Realizar muchas y variadas actividades es enriquecedor, pero puede generar cierto estrés o intranquilidad cuando surgen dificultades para llevarlas a cabo. Por ello, conviene ser selectivo/a y elegir las que más nos interesen y, luego, planificarlas todas para sacarles el máximo partido.

Mímate.- Intenta dedicarte, al menos, unos minutos cada día a ti mismo/a. Tómate un baño relajante, hazte un masaje o ve a la peluquería. Si cuidas tu aspecto físico, te gustarás más y, en consecuencia, te sentirás mejor y se reflejará en tu estado de ánimo.

¡SONRÍE! CONTAGIA ALEGRÍA Y BENEFÍCIATE

Con este simple y espontáneo gesto puedes lograr muchas cosas. Cuando nos reímos, nos contagiamos de alegría y lo transmitimos a quienes están a nuestro alrededor. Además, la buena sintonía que desprende ese movimiento facial repercute muy positivamente en nuestra salud. ¡Aprovéchate de las incontables virtudes de unas carcajadas!

Hace más atractivo/a.- La sonrisa es uno de los puntos fuertes del rostro. Quienes se ríen con frecuencia resultan más atractivos a la vista de los demás y desprenden simpatía y proximidad. Además, en una pareja, esta comunicación no verbal crea vínculos muy fuertes.

Libera tensiones.- Reír es un mecanismo de defensa, tanto a nivel físico -reduce la presión sanguínea, relaja los músculos y estimula las defensas- como emocional -frena el estrés y la ansiedad-, que nos ayuda a relajarnos. Cuando lo hacemos, liberamos endorfinas, unas hormonas que nos hacen sentir felices. Por otro lado, la risa rompe la tensión social que se crea en determinadas situaciones, aportando naturalidad.

Corazón sano.- Diversos estudios confirman que las personas risueñas tienen un 40% menos de probabilidades de sufrir un infarto porque, al reír, el tejido que recubre los vasos sanguíneos se expande y evita que se formen coágulos.

Alarga la vida.- Según un estudio de la Universidad de Navarra, está practica tan sana refuerza nuestro sistema inmunológico y, en consecuencia, puede hacernos más longevos.

CAPRICHOS PARA EL PALADAR Y EL OLFATO

Algunos alimentos contienen sustancias químicas excitantes que ejercen un efecto positivo sobre nuestro estado de ánimo. ¡Date un capricho de vez en cuando!

Dulces.- En contacto con la lengua, el azúcar estimula la producción de endorfinas que, en el organismo, provocan bienestar emocional. El chocolate, por ejemplo, contiene feniletilamina, un tipo de endorfina que nos despierta un sentimiento de euforia.

Aromas.- Determinados olores pueden hacerte sentir mejor. Además del aroma a chocolate, el del café favorece la relajación, el del limón mejora el estado de ánimo y el que desprenden las rosas, el jazmín y la lavanda provoca emociones positivas.





lunes, 2 de diciembre de 2013

Las etapas de una relación sentimental


La trayectoria de una pareja pasa por varias fases: el enamoramiento, la llegada del primer hijo, la época de la madurez... Cada una de ellas tiene sus ventajas e inconvenientes y, para disfrutar plenamente de todas ellas, es importante saberse adaptar a sus características. Cómo hacerlo:

-Los seis primeros meses. El deseo sexual es tan intenso y apabullante que todo lo demás queda en un segundísimo plano. Qué hacer. Por muy fuerte que sea la pasión, nunca pierdas de vista otros aspectos importantes de tu relación. Te ayudará a conseguir continuidad en el futuro.

-Los tres primero años. La unión se afianza día a día y, si fuiste cauto/a en la etapa anterior, viviréis una época muy plena y feliz. Qué hacer. Aprovecha la confianza de la que gozáis para limar posibles asperezas y adaptaros mejor el uno al otro.

-A partir de los tres años. La unión es total, aunque es posible acusar una cierta monotonía, sobre todo por lo que respecta al sexo. Qué hacer. No te olvides de los mimos y sigue ganándote el amor de tu pareja a diario.

-Llegan los niños. Aumentar la familia refuerza los lazos, pero también puede convertirse en una fuente de problemas. Qué hacer. No renunciéis a la intimidad. Reservaros momentos para estar solos y tranquilos.


domingo, 24 de noviembre de 2013

Controla las preocupaciones para conseguir un estado de ánimo más sereno


Priorizar lo importante y aprender a relativizar aportará paz a tu vida 

 Hay etapas de nuestra vida en las que los problemas nos superan o tendemos a sobredimensionarlos. Esta situación de intranquilidad condiciona nuestro día a día y nos impide avanzar. Analizar qué nos preocupa y si merece la pena invertir tanto tiempo en ello nos ayudará a valorar los problemas desde otra óptica y nos permitirá recuperar la calma


 Ver el vaso medio lleno o medio vacío sólo depende de nosotros. Frente a una situación adversa o una racha complicada, podemos reaccionar lamentándonos y considerándonos víctimas de la misma o bien encarándola de una forma positiva y asumiendo que los momentos menos fáciles forman parte de nuestra existencia y, como tales, nos ayudarán a evolucionar. 


 Toma la rienda y guía tus pasos 

 Las prisas, la necesidad de quererlo todo al instante y las autoexigencias laborales y personales que nos imponemos acaban pasándonos factura. Esto deriva en una serie de preocupaciones que pueden acabar convirtiéndose en el centro de nuestras vidas. ¡Ponerle remedio es más fácil de lo que parece


Sé selectivo/a. Muchas de nuestras preocupaciones surgen porque queremos acaparar demasiadas cosas. Elige qué es lo importante y descarta aquello de lo que puedas prescindir. Aprende a establecer prioridades y, sobre todo, a decir que no. Así, disfrutarás más intensamente de todo lo que hagas y evitarás situaciones de estrés. 
Controla tu vida. Cuando priorizas, automáticamente estás eligiendo una opción y descartando otra. Este proceso selectivo, además, te permite tomar las riendas de tu vida y tenerla bajo control. Ese dominio del entorno genera tranquilidad y la sensación de saber que eres dueño de tus actos. 
Pensamiento positivo. ”Un optimista ve una oportunidad en toda calamidad; un pesimista ve una calamidad en toda oportunidad”. Esta máxima del primer ministro británico Winston Churchill resume a la perfección las distintas maneras de reaccionar de las personas frente a la adversidad. La misma realidad puede ser interpretada y vivida de dos maneras diferentes, dependiendo del enfoque que cada uno le dé. Además, nuestros pensamientos y acciones condicionan nuestras emociones, por lo que, si son positivos, incidirán favorablemente en nosotros y nos ayudarán a alcanzar la anhelada calma. 
Quítales importancia. Unido al pensamiento positivo, está la capacidad de valorar las preocupaciones en su justa medida. Aunque éstas puedan perturbar nuestra vida diaria, hemos de entender que son pasajeras y no deberían condicionar nuestro presente. 
Mímate. Intenta dedicarte un rato al día a ti mismo/a, aunque sean 20 minutos. Lee un libro, tómate un baño relajante o hazte un masaje corporal. Durante ese tiempo, toda tu energía se focalizará en esa actividad y los problemas quedarán en un segundo plano. 


 Confiar en ti: Garantía de éxito 

 Tú eres quien mejor sabe cuáles son tus puntos fuertes y débiles. Aprovecha esta ventaja para “dominar” los contratiempos y encontrar la paz y el bienestar interior. 
De frente. Busca el origen de tus preocupaciones y encáralas. Huir de ellas o aparcarlas es una solución válida sólo temporalmente, porque, al final, tendrás que acabar controlándolas. 
Aprendizaje útil. Poner en práctica tus recursos es una habilidad que te ayuda a saber qué aspectos personales debes reforzar para sentirte bien –como la paciencia o el tesón-. Este proceso es un aprendizaje muy útil para ganar confianza en ti mismo/a y conocerte más. 


 MANTENER TU MENTE OCUPADA: LA MEJOR DISTRACCIÓN 

 Dedicar una parte de tu tiempo a hacer cosas que te gusten y te aporten un beneficio personal es una manera muy saludable y divertida de despejarte. ¡Llena tus horas libres de actividades, disfruta de ellas y mantén las preocupaciones alejadas de ti! 
 • Lleva una vida social activa. Disfrutar de los amigos y de una buena compañía es la mejor terapia para estar entretenido/a. Haz planes en grupo, intenta mantener un contacto diario o muy frecuente con tus amistades y seres queridos y rodéate de personas optimistas y vitales. 
Haz ejercicio físico. Practicar algún deporte es un antídoto muy eficaz contra las preocupaciones y una gran ayuda para liberar tensiones. Muévete: basta con un paseo a diario para sentirte mejor. 
Aprende a relajarte. Algunas técnicas, como el yoga y el taichí, mejoran la respiración y ayudan a recuperar la tranquilidad. Encontrar la serenidad corporal mejora el ánimo. 
Disfruta del aire libre. La vida en la ciudad y en los núcleos urbanos y las obligaciones laborales pueden generar situaciones de estrés. Intenta escaparte de vez en cuando a algún lugar alejado de la contaminación atmosférica y acústica. ¡Deja que fluyan los problemas en un entorno natural! 
Descansa. Todas estas actividades deben combinarse con un buen descanso, la desconexión más confortable y efectiva. Intenta mantener las mismas horas de sueño durante la semana y acostarte y levantarte a la misma hora.





viernes, 22 de noviembre de 2013

Un valor que nunca cambia


 Una profesora decidió dar una lección práctica e inolvidable a sus alumnos y, para ello, se sirvió de un flamante billete de 5 euros. "¿A quién le gustaría tener este billete?", les preguntó a los pequeños. Todos levantaron la mano sin dudarlo un segundo.

  Después, ante el asombro de los niños, la profesora arrugó el billete hasta que casi quedó convertido en una bola de papel. No obstante, cuando les volvió a hacer la misma pregunta, todos seguían deseando poseer esos 5 euros.

  Finalmente, la profesora tiró el billete al suelo, y como poseída por un ataque de ira, lo pisoteó hasta convertirlo en un trozo de papel sucio como sacado de la basura. "¿De verdad que aún seguís interesados en él?". Los niños, sin poder aguantar la risa ante esta original clase, continuaron afirmando en coro con un sonoro "Sííííí...".

  "Pues bien", prosiguió la profesora, "a vosotros os puede pasar lo mismo que a este billete. Aunque os sintáis rechazados, pisoteados y maltratados por algunas personas, sabed que, para quienes realmente os quieren, vuestro valor nunca cambiará por muy "arrugados" que estéis".



jueves, 21 de noviembre de 2013

Controla tu mal genio


La ira no es buena consejera, pues conduce a un sentimiento de culpabilidad y tristeza. Sin embargo, conviene expresarla, pues, en caso contrario, provoca tensión, pensamientos hostiles y desprecio hacia el otro.
Para evitarlo:

  • Primero hay que aceptar el sentimiento que te ha sacado de quicio y observarlo.
  • El siguiente paso es reducir la ira: sal del lugar donde estés, toma el aire, aíslate para escribir el problema, intenta relajarte.
  • Expresa la ira de forma asertiva, comunicando la emoción sin atacar la autoestima del otro y sin descentrarse del problema en cuestión. Así evitas el malestar y refuerzas la propia autoestima.
  • No dramatices. No hay nada tan importante en la vida como para que te haga perder los nervios controladamente. Además, si no manejas tu mal genio, las consecuencias negativas se podrían multiplicar en varios frentes y el resultado empeoraría.



lunes, 11 de noviembre de 2013

Estar a las duras y a las maduras


10 Claves para alargar la vida de tu relación

 Los comienzos de una relación de pareja suelen ser tan maravillosos que parece imposible que en algún momento pueda cambiar. Sin embargo, se trata de una de las relaciones interpersonales que más acusa la dificultad de adaptación acusa la dificultad de adaptación a causa de la diferencia de opiniones, costumbres y experiencias anteriores. Por eso, tener una buena relación de pareja requiere esfuerzo, y tal y como afirma el psicólogo Luis Echegaray Vivanco también es importante no valorarla por su nivel de pasión, ya que es normal que éste suba o baje en determinados momentos, y sí basarse en el grado de amistad y los intereses comunes, porque son mejores indicadores de una relación estable. En cualquier caso, para prevenir o afrontar los conflictos, poned en práctica el siguiente decálogo: 


1- Desarrollad intereses comunes para compartirlos en el tiempo de ocio. 

2- Sed tolerantes con respecto a las opiniones y momentos de mal humor del otro, desarrollando la empatía. 

3- Recordad que ser pareja de alguien no significa dependencia, sino complementariedad. 

4- Asumid la responsabilidad de todos los hechos derivados de vuestra relación. 

5- Potenciad la confianza mutua para aumentar vuestro nivel de intimidad y aceptación a través de un diálogo sincero. 

6- Escuchad y expresad “calidez”, aunque no tengáis respuestas o soluciones. 

7- No hagáis promesas que no podáis cumplir. 

8- No culpabilicéis. Recordad que nunca hay una única persona responsable del problema. 

9- Durante la conversación, tratad de ser objetivos y mantened siempre la calma, intentando que la lógica gane a las reacciones viscerales. 

10- Analizad todos los aspectos del problema y no saquéis antiguos “trapos sucios”.


Relaciones tóxicas

¡Corta con quien te hace daño! 

 Si un amigo te decepciona, hiere, humilla o traiciona y, como consecuencia de ello, decides romper la relación, el psicólogo Francisco Gavilán, autor de Todas esas amistades peligrosas (Planeta), recomienda observar la siguiente regla de oro: “La amistad debe diluirse aflojando gradualmente los lazos que sirvieron para unirla“. Esta estrategia es más adecuada que una ruptura drástica o una confrontación directa, que podría provocar deseos de venganza de tu ex amigo. Otras recomendaciones son: 


 - Provoca un enfrentamiento gradual. Si te llama para salir, utiliza excusa del tipo: “Lo siento, trabajo en un nuevo proyecto que durará meses”. 

 - Controla tus emociones. Si te ves obligado a hablar con él de tu ruptura, mantén la calma al hablar; si no, tal vez digas algo que pueda volverse contra ti. 

 - Dignifica el fin de la amistad. Sé discreto para que tu ex amigo no se sienta humillado ante los demás y para evitar que también él haga comentarios sobre ti. 

 - Pon en paz tu conciencia. Si te sientes mal por la ruptura, recuerda los motivos de peso que te llevaron a tomar la decisión.


domingo, 11 de agosto de 2013

Dejar de inquietarse en exceso


"Solo una pequeña parte de lo que tememos ocurre realmente", escribe la psicóloga Bobbi Emel, especialista en resiliencia (capacidad de los sujetos para sobreponerse a períodos de dolor emocional y traumas), en su blog Bounce (Rebotar). Para Emel, detrás de la preocupación excesiva se hallan creencias erróneas, como pensar que si nos preocupamos lo suficiente, aquello que tememos no pasará. Para controlar ese exceso de preocupación, que favorece el estrés y daña nuestra salud, propone dedicar media hora diaria a escribir sobre aquello que nos inquieta o destinar un día a la semana a preocuparnos, y así liberarnos de esos temores el resto del tiempo.


Las fantasías avivan el deseo


A pesar de los tópicos, hombres y mujeres experimentan prácticamente el mismo tipo de fantasías sexuales, aunque con distinta frecuencia. De todos modos, las mujeres tienen más fantasías agradables y de tipo íntimo y romántico, mientras que los hombres se inclinan más por fantasías de tipo exploratorio: sexo en grupo, promiscuidad, intercambio... Estas son algunas de las conclusiones provisionales de un estudio de la Universidad de Granada publicado en la revista Anales de Psicología y que ha divulgado la agencia SINC. La misma agencia recoge la opinión de los investigadores, que afirman que las fantasías "favorecen aspectos como el deseo o la excitación sexual, por lo que son un indicador de salud sexual".


miércoles, 20 de marzo de 2013

Subir la autoestima



  • Valórate a ti mism@ sin esperar que lo hagan los demás. Sé tu propi@ mejor amig@. Quiérete.
  • No pierdas en ninguna circunstancia el sentido del humor y trata de desdramatizar cualquier hecho desgraciado que te ocurra.
  • Convéncete de que las causas de todo lo bueno que sucede son constantes y tienen que ver con tus habilidades y valores y con nada más.
  • No desconectes jamás la comunicación positiva contigo misma. Saca provecho del día a día para enriquecerte personalmente.
  • Disfruta con el trabajo, mantén siempre una sana ambición y deseo de superación.
  • Recuerda que tú eres felicidad, y que ésta depende sobre todo de tu actitud, más que de las circunstancias que te rodean.
  • Asume que la mejor manera de prepararse para vivir bien en el futuro es vivir el presente a tope, con plena sinceridad u con una sonrisa en los labios.
  • Asume que con tu vida, tu trabajo y tu esfuerzo haces felices a otros. Practica el principio"cuando yo gano-tú ganas"; disfruta haciendo el bien y te sentirás mejor.
  • Los fracasos, de la misma manera que los errores, son oportunidades para aprender y para evitar nuevos y mayores errores.
  • Lamentarse y quejarse sólo sirve para agotarse física y mentalmente. Si eres inteligente, engánchate a la alegría, a las ganas de vivir, y a disfrutar a tope.

Trucos que te harán más feliz



  • Conjuga el verbo ser mejor que el verbo tener.
  • Escucha a todo el mundo. De todos podemos aprender algo positivo.
  • No vives solo. Si piensas en los demás, tu relación contigo mismo cambiará.
  • Unas veces ganas en unos aspectos y pierdes en otros. Asumirlo es sinónimo de inteligencia.
  • Relativiza. Ni todo es blanco ni todo es negro. La vida está llena de matices grises.

miércoles, 30 de enero de 2013

Causar buena impresión


Seguro que has conocido a personas con las que te has sentido incómodo desde el principio o que te han caído de maravilla de inmediato, y sin saber explicar muy bien por qué. Según los expertos, disponemos de entre siete y 17 segundos antes de que las personas se formen una opinión sobre nosotros. Aunque los hechos posteriores puedan servir para que reconsideren su primera impresión, es difícil que erradiquen por completo sus primeros sentimientos hacia nosotros. Para que la cosa marche bien hay unas pautas a seguir:

  • Da protagonismo a la otra persona. En lugar de hablar solo de ti, procura convertir a tu interlocutor en el centro de atención sin dejar de formar parte de la conversación.
  • Evita el "síndrome del gracioso". El humor es un buen recurso si se sabe cómo utilizarlo, pero, cuando no se conoce a la otra persona, es mejor evitar según qué chistes para no meterse en un terreno que, tal vez, pueda herir o molestar.
  • Muéstrate atento. Para confirmar que estás prestando atención, mira a la persona a los ojos y sonríe abiertamente cuando te hable.
  • Mantén una actitud positiva y trata de contagiarla. Demuestra con actos que quieres que se sienta bien en tu compañía. Y, sobre todo, sé tú. Muéstrate tal y como eres.
  • Escucha lo que te dicen. Muestra interés sincero y, sin interrumpir, da muestras de que sigues lo que te cuentan.
  • Observa sus respuestas y emociones. Procura ver cómo responde y trata de reconocer sus emociones. Te servirá para saber si es una persona tímida, si busca amigos o si está interesado en ti.
  • Ponte en su nivel de cordialidad. No hace falta que te muestres serio, especialmente si tratas con una persona de conversación alegre y desenfadada.
  • Hazte entender. La gente tímida tiende a murmurar en lugar de hablar, como si lo que tuvieran que decir no fuera importante. No tengas reparos en vocalizar bien.

viernes, 18 de enero de 2013

Complejo de Cenicienta


El complejo de Cenicienta pueden padecerlo desde amas de casa sumisas hasta profesionales cualificadas que bajo una fachada de éxito ocultan el miedo y necesitan subordinarse o depender de otras personas. Para la psicóloga norteamericana Colette Dowling, autora del libro El complejo de Cenicienta, este tipo de  mujer esconde un tremendo miedo a la independencia. El deseo de que otras personas cuiden de ellas las sume en una especie de letargo que les impide desarrollar sus facultades y creatividad. "Como Cenicienta -explica- estas mujeres esperan algo que venga a transformar sus vidas". Y ese algo, por lo general, es un hombre, un príncipe azul que llega para salvarlas. Un varón en el que apoyarse y que les evite el esfuerzo de enfrentarse a la vida. Ese anhelo de que alguien cuide de ellas tiene mucho que ver con la forma en que se ha sido educada en la infancia. Y es que las actitudes protectoras y discriminatorias de muchos padres hacia sus hijas acaban por convertirlas en seres dependientes y asustados.

Los síntomas más característicos de alguien aquejado de este complejo son: una autoestima penosamente baja; indecisión e inseguridad (aunque aparentemente se comporten con dominio de sus sentimientos) que pueden llegar a desembocar en angustia, depresión o abandono de ilusiones para buscar la protección de un hada madrina.

Aprender a tomar resoluciones, coger las riendas y cargar con la propia vida no resulta nada fácil, pero los psicólogos recomiendan una serie de acciones para aumentar la seguridad:


  • Sentirse necesitada de protección y amparo no es malo, pero si has renunciado a una parte esencial de ti misma y no sabes asumir las responsabilidades, debes esforzarte por liberarte de las ataduras que te inmovilizan.
  • Comienza a atribuirte algún mérito y virtud.
  • No te responsabilices de los fracasos de los demás.
  • Enfrentarse a las situaciones de riesgo y a los sentimientos nuevos incrementa el espíritu aventurero. ¡No huyas y empieza a hacerlo!
  • Acepta la responsabilidad de tomar decisiones y emitir juicios. Basta de acomodarte a las opiniones y sugerencias de los demás.
  • Deja de creerte una víctima. Tú eres la responsable tanto de tu felicidad como de tu desdicha. Conviértete en dueña de ti misma.
  • Intenta independizarte económicamente, si puedes; y si eres ama de casa ten muy claro que no tienes que pedir permiso a tu marido para comprarte un vestido o darte un capricho. Él trabajará fuera de casa, pero tú lo haces dentro y para toda la familia, así que el dinero es de los dos.

miércoles, 9 de enero de 2013

Vivir sin complejos



10 claves para ser feliz dentro de tu piel

Todos tenemos defectos, inseguridades y pequeños complejos que alteran más o menos nuestra vida. Es normal. Sólo se convierten en patológicos cuando el miedo y los mecanismos de defensa interfieren y producen trastornos en la vida cotidiana, cuando se convierten en una fuente de frustración, angustia y agresividad; cuando deseamos haber nacido en otro cuerpo o con otra personalidad. Pero, ¿cómo podemos detectar los complejos? ¿Cómo afrontarlos sin darle más importancia de la que tienen? He aquí diez máximas que nos ayudarán a vivir lo mejor posible a pesar de tener algún que otro defecto:

Sé realista. Has un esfuerzo por conocer más profundamente tanto tus aptitudes como tus limitaciones.

- Explora tus reacciones. Cuando notes que te enfrentas a situaciones que te restan seguridad, tranquilidad o energía, intenta analizar cuál puede ser el motivo.

- Acepta tus defectos y contrarréstalos con tus mejores virtudes y méritos. Muéstrate como eres, pero procura corregir los aspectos menos positivos.

- Acrecienta tu voluntad a base de proponerte objetivos, caer y levantarte hasta que modifiques tus errores. Corregir patrones de conducta lleva tiempo, e incluso la colaboración de quienes te rodean.

- Empieza poco a poco, pero con insistencia, a cambiar lo que no te gusta. Plantéate de una forma sencilla y concreta los objetivos que necesitas alcanzar.

- Pon los medios para defenderte frente a los estímulos negativos y sentimientos que rompen tu equilibrio interno.

- Evita la ansiedad, la inquietud, el desasosiego, el estar en guardia esperando lo peor sin saber exactamente a qué tienes miedo. Utiliza técnicas de relajación para estar más tranquila.

- Preocuparte por tu existencia y trayectoria personal no es patológico, pero no estés excesivamente alerta sobre cómo debes reaccionar en cada momento, cómo has de presentarte ante los demás, cómo controlar tu vida emocional, etc.

- Recuerda que la vida está forjada por una tupida red de tensiones y conflictos, momentos buenos y malos, virtudes y defectos. Mira el futuro con optimismo.

- No dudes en buscar la ayuda de un terapeuta profesional cuando te sientas incapaz de superar tus complejos o cuando te domine la angustia. También si notas que te está creando problemas de adaptación social.



domingo, 6 de enero de 2013

Buena suerte: qué podemos hacer para conseguirla



Tener buena fortuna no sólo depende del destino. Hay muchas cosas que puedes hacer para atraerla, desde adoptar una actitud positiva hasta confiar un poco más en ti mismo/a. Sigue estos consejos y verás como, con empeño y tesón, la suerte dejará de esquivarte.


  •  Hay personas que, cansadas de esperar sin resultado a que la suerte llame a su puerta, pierden la esperanza de conseguirla. “No he tenido fortuna en la vida”, se lamentan, y acaban arrojando la toalla. Hay otras, sin embargo, que en lugar de esperar a la suerte, deciden salir a su encuentro. Son personas positivas y emprendedoras que, aunque son conscientes de que su objetivo no será fácil de alcanzar, no se amedrentan por ello.
  •  No se trata únicamente de valentía y arrojo, sino también de confianza en uno mismo, ya que sólo aquellos/as que son conscientes de sus cualidades tienen la seguridad suficiente como para atreverse a poner toda la carne en el asador y demostrar su valía ante los demás.
  •  También es muy necesario tener confianza en el futuro y no rendirse ante los primeros fracasos. Si se mantiene viva la ilusión, tarde o temprano se obtendrán resultados.
  •  Para atraer la suerte, es conveniente, además, ser creativos, confiados y agradables con los que nos rodean.