lunes, 10 de enero de 2022

Cuando no podemos olvidar un viejo amor


Los seres humanos somos los únicos animales que podemos vivir varias vidas en una sola porque nos relacionamos con muchas personas. Construimos vínculos diferentes a lo largo de nuestra vida: primero los vínculos familiares (en nuestro entorno más cercano), después los vínculos amistosos (al principio en el colegio y en el vecindario), y los vínculos amorosos.

En cada etapa de nuestra vida podemos empezar a amar a gente nueva que conocemos y, simultáneamente, también podemos dejar atrás a personas muy queridas. Ocurre porque evolucionamos de manera diferente, porque la gente se aleja o porque nos alejamos nosotros. Es normal a medida que construimos nuevas relaciones y caminamos hacia el futuro, determinadas cosas del pasado van quedando atrás.

Sin embargo, a veces ocurre que nos quedamos viviendo anclados en relaciones tóxicas del pasado y eso hace que nos perdamos la oportunidad que nos brinda la vida de vivir varias vidas en una, de estrenar nuevos afectos, de vivir nuevas emociones ue nos hagan crecer y evolucionar como personas.

Es decir, para poder empezar una "nueva vida", a veces se hace necesario dejar atrás determinadas personas del pasado. Es cierto que puede costar dar este paso pero la única manera de lograr un cambio es moviendo nuestro cuerpo y tomando decisiones. Debemos recordar que nuestro tiempo es oro: si una relación no crece, se estanca. Si una relación no sucede ahora, no sucederá. El tiempo ni se vende ni se compra, solo se puede compartir con la gente a la que queremos.

Si tienes claro ue no has nacido para esperar, entonces te resultará más fácil convertir el presente en pasado y mirar hacia el futuro con alegría.


No hay comentarios:

Publicar un comentario